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La noticia saltaba hoy a los medios de comunicación. La empresa multinacional de mensajería (entre otras muchas líneas de negocio) Amazon, va a contratar hasta 1.000 personas para afrontar de forma efectiva la campaña de Navidad.
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La expectativa genera acción
Si Amazon avisa de que va a contratar gente para Navidad porque va a recibir más pedidos que el resto del año, al final recibirá efectivamente una mayor cantidad de pedidos.
Esto se debe a que mediante el anuncio de una expectativa positiva, los usuarios y potenciales clientes confían en la empresa. Por un lado por el efecto de seguimiento de otros usuarios, sea cierto o no, que van a comprar en ese portal, tal y como afirman desde la empresa que va a suceder.
Del mismo modo, el hecho de contar con un grupo tan numeroso de trabajadores en su sede de logística en San Fernando de Henares, en Madrid, ofrece una mayor confianza para el comprador, que considerará que el producto que está pidiendo que se lo entreguen a domicilio llegará en el tiempo estimado.
El empleo puede mejorar la imagen de marca
Las grandes multinacionales tienen un enemigo común, la imagen de que son empresas que no se preocupan por sus empleados. En un entorno social como el actual y, más concretamente, en España, esto es un grave problema que puede conllevar a una crisis de reputación online.
Amazon, consciente de esta problemática actual y sabiendo que la contratación de 1.000 empleados responde a una campaña temporal de corta duración, deja claras sus intenciones. Pero no sólo establece públicamente la temporalidad de los contratos, sino que detalla las condiciones de los mismos, obviamente potenciando sus valores positivos:
- Sueldo mensual superior a 1.500 euros
- Cobertura de seguro médico
- Plan de pensiones
- Descuentos en productos de la empresa
- Ayudas en formación profesional
Estas condiciones no siempre son ofrecidas en contratos estándar, mucho menos todavía en contratos de trabajos por obra o por campaña. Con una comunicación sobre estos detalles, Amazon consigue prevenir una potencialmente dañina crisis de reputación online, sobre todo de cara a una época en la que las empresas van a tener una actividad, a todos los niveles, superior al resto del año.
La estrategia perfecta se cerraría con el balance anual de ingresos y beneficios, sobre todo en una comparativa positiva con el año anterior, que le permitiría afrontar a Amazon 2017 con expectativas interesantes en cuanto a cuota de mercado, imagen empresarial y reputación online.
